Inminente acuerdo para la venta del Málaga CF al grupo albano-ruso Oil Taçi
Ambas partes intensificaron ayer las negociaciones y prácticamente quedó todo cerrado a falta de cerrar la auditoría
Los nuevos inversores tienen previsto hacerse cargo del cien por cien de la deuda contraída por el club.
José Criado El Málaga CF está cerca de pasar de las manos del jeque Al-Thani a un holding de empresas albanesas y rusas, en las que destaca el grupo Oil Taçi y en una venta express que está a punto de terminar de fraguarse. Ayer se intensificaron las negociaciones y las reuniones entre los representantes de ambas partes y el acuerdo, según pudo saber este medio, era inminente a falta de la fumata blanca definitva.
Tanto el jeque Al-Thani, que está dispuesto a vender, como el Grupo Taçi, que está muy interesado en comprar, alcanzaron ayer un principio de acuerdo para cambiar la propiedad de manos, pero las gestiones sufrieron en el último punto un pequeño frenazo por la compleja y abultada deuda que arrastra el Málaga CF estos días, que supera los 70 millones de euros.
Así, la negociación está a expensas de conocer con exactitud la deuda con la que cuenta actualmente la entidad de Martiricos. Para ello se comenzó a hacer estos días una auditoría profunda, que se inició con la llegada de Moayad Shatat a Málaga, un ejecutivo del jeque Al-Thani. Los nuevos inversores no quieren sorpresa alguna una vez realizado el cambio de propiedad y quieren tener todo muy bien atado.
Pese a que no han trascendido cifras oficiales, la venta rondaría los 36 millones de euros, el mismo precio por el que el jeque Abdullah Al-Thani compró el club años atrás a Fernando Sanz. Sin embargo, en esta ocasión la deuda sería mucho mayor y correría a cargo de los nuevos propietarios al cien por cien. La intención del jeque no es de sacar demasiado dinero con la venta del club. Un negocio que por otro lado sería casi ruinoso para el empresario árabe. El jeque ha invertido en el Málaga CF desde que aterrizó casi 150 millones de euros. Su apuesta inicial fue demoledora, pero en los últimos meses las deudas y los impagos se han acumulado en el club.
Al-Thani ha inyectado 80 millones de euros sólo en fichajes. Aterrizó en verano de 2010 con una presentación «galáctica» y su intención era hacer un gran proyecto con una Ciudad Deportiva (La Academia) y un estadio nuevo.
Ahora el nuevo grupo inversor está dispuesto a continuar la línea que el Málaga llevaba meses atrás. La intención de los futuros propietarios es de darle continuidad al proyecto que ha dejado al equipo cuarto y en una plaza Champions. De hecho, una de las razones por las que la negociación ha tomado tanta velocidad y rapidez, pese a ser un traspaso de elevadas dimensiones económicas, es para evitar que el club sufra daños por los inminentes pagos que tiene que afrontar el Málaga en los próximos días.
El 31 de julio, el club tiene que hacer frente a uno de los pagarés que negoció con la plantilla en Campoamor y de no ser atendido podría tener graves consecuencias para la entidad. Es por ello que las negociaciones están llevándose con tanta celeridad. El nuevo grupo inversor estaría dispuesto a hacer frente a esos pagos y a afrontar todas las deudas contraídas.
Otro frente, además, será atender a la parcela deportiva. El equipo, que aún no ha movido ficha en el mercado se encuentra sólo a semanas de jugar la fase previa de la Liga de Campeones. Y eso no es sólo un importante evento deportivo, ya que de acceder a la Champions, la inyección económica sería sumamente elevada (siete millones de euros, como mínimo).
La incertidumbre en la plantilla y en el malaguismo también es palpable. El cambio de propiedad ha generado sentimientos encontrados entre los aficionados, que miran con recelo cualquier cambio en el club. Sólo el tiempo podrá aclarar las dudas.